¡¡Qué impresión!! Tantos meses sin escribir y sin saber de mis lectores queridos, ya los extrañaba tanto, pero en esta ocasión no hay excusas, así que manos a la obra para empezar el mes de la mejor forma.
En estos últimos meses empecé a experimentar un nuevo estilo del cual me he enamorado por completo, y es que es de estos estilos originales, divertidos, únicos y con mucha ondita que es inevitable no amarlo.
El estilo del que te hablo es el Boho Chic, que es un tanto relajado, romántico, con toques bohemios, hippies y étnicos. Una mezcla muy curiosa que luce increíble pero sobretodo logra reflejar esa esencia de un espíritu libre y arriesgado que no conoce límites.
Uno de los puntos importantes para lograr un look Boho Chic es usar ciertas prendas con caídas suaves, sueltas y muy ligeras, una gran ventaja que tiene este estilo es que busca que te sientas cómoda, por lo que nunca debes olvidar que estar cómoda significa que te veas mal, la verdad es que es todo lo contrario. Mientras más cómoda te sientas, lucirás de lo mejor ya que te sentirás más a gusto.
Toma también en cuenta que los tejidos, estampados y texturas de las prendas son étnicas y con muchos detalles, flecos y pedrería.
No podemos olvidar los zapatos y accesorios. Para este estilo no es necesario usar tacones o plataformas que nos hacen sentir muchas veces incómodas. Aquí puedes usar botines, botas o sandalias.
En cuanto a los accesorios, los sombreros son un punto muy fuerte ya que le da cierto aire bohemio al look, también puedes usar brazaletes, anillos o collares con piedras, detalles en tonos cobrizos o más apegados a una paleta en tonos tierra.
Finalmente me decidí a jugar un rato y crear este look que definitivamente hizo de mi alma la más Boho Chic.
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Fotografía: @jsarred
Blazer: Zara
Botines: Stradivarius
Vestido: Sumaqkay
Bolso: Dooney & Bourke
Collar: Vintage